Segunda visita de mi madre a Casa De Gregorio (Casa-Benetton) y ésta vez se va más contenta que la primera. Vivo en una habitación más grande, me puedo permitir los yogures de marca y tengo un "amigo".
Yo me quedo más o menos igual que la primera vez. Parece mentira lo pronto que me acostumbro a tenerla cerca, al olor de su tortilla de patatas y a sus inventos de MacGyver (cogió la funda de la almohada que se me había caído por el patio y había acabado en las cuerdas de tender del vecino de abajo con dos palos y cinta aislante).
Lo único malo es que he vuelto a comprobar que por boca tiene un buzón de los de meter sobres grandes... Después de contarme las novedades sobre los hijos de sus amigas (todas me hacen parecer a sus ojos la moza ideal) me ha confesado que "por solidaridad" les ha contado lo de que salgo con un chico... Bueno y también se lo ha contado a mis tíos que para algo son sus hermanos.
- Hija si me preguntan si has conocido a alguien ¿qué quieres que les diga?
- Pues la verdad mamá, que he conocido muchísima gente.
- Ya bueno pero ya me entiendes, si lo hago para que no se piensen que eres perfecta.
-¿Pero qué tiene de imperfecto empezar a salir con alguien?
- Bueno mujer...
- Bueno pero no has dicho nada más ¿no?
- Hombre, tu tío sabe que sale en la tele...
- Ay mamá ahora se van a pensar que es el corresponsal en China
- Uy ¡no! le he dicho que es el de Londres.
- ¿¿¿¿Cómo????
La imagen de mi tío, jubilado, haciendo zapping para encontrar a Novio y discutiendo con mi madre sobre si tiene o no entradas me ha puesto los pelos como escarpias pero... es que la quiero. Es rubia y con los ojos verdes. Cómo no la voy a querer...
6 comentarios:
Jajajajajajjajaja! formidable! en qué momento hacen las madres el cursillo de madres? (qué cursillo, el máster!)
Maravillosa la imagen de tu tío buscando a Novio (ese no puede ser, que es muy viejo, este otro tampoco, que es mu feo...)
Tú imagínate a un señor bajito y muy moreno arrepachingad en su sofá diciendo... oye pues no tiene entradas el chico... ¡levanta la ceja y todo!
-hija pues tiene entradas.
Ella, mala como es, complace
-si, bueno mamá. Tiene treinta...
-uy! y la de chinos que hay en Londres no?
Pero siempre es peor que le quiten la duda, porque no hay manera de quitarme el sanbenito chulopiscinesco!!
Buenas noches, le escribe Joseph Benavides Cuba. Hace varios años, para ser más exacto, hace unos 13 años, en 1998, cuando tenía 17 años, me acuerdo que una noche iba con mi hermano, regresábamos a la tranquilidad de nuestra casa, y al doblar por la esquina de una calle (no había nadie en ese momento) vi a una chica que se asomó de su ventana. Ya no recuerdo bien cómo era, tal vez sólo que era muy simpática. Solamente la vi, y ella por casualidad nos vio a nosotros. Su casa era de color azul, y desde entonces fue para mi "la chica de la ventana azul". Apesar que pasé varias veces por su casa en estos siguientes años nunca la he vuelto a ver (aunque su casa sigue siendo de azul, aunque ahora de un azul claro).
Buenas noches, le escribe Joseph Benavides Cuba. Hace varios años, para ser más exacto, hace unos 13 años, en 1998, cuando tenía 17 años, me acuerdo que una noche iba con mi hermano, regresábamos a la tranquilidad de nuestra casa, y al doblar por la esquina de una calle (no había nadie en ese momento) vi a una chica que se asomó de su ventana. Ya no recuerdo bien cómo era, tal vez sólo que era muy simpática. Solamente la vi, y ella por casualidad nos vio a nosotros. Su casa era de color azul, y desde entonces fue para mi "la chica de la ventana azul". Apesar que pasé varias veces por su casa en estos siguientes años nunca la he vuelto a ver (aunque su casa sigue siendo de azul, aunque ahora de un azul claro).
Buenas noches, le escribe Joseph Benavides Cuba. Hace varios años, para ser más exacto, hace unos 13 años, en 1998, cuando tenía 17 años, me acuerdo que una noche iba con mi hermano, regresábamos a la tranquilidad de nuestra casa, y al doblar por la esquina de una calle (no había nadie en ese momento) vi a una chica que se asomó de su ventana. Ya no recuerdo bien cómo era, tal vez sólo que era muy simpática. Solamente la vi, y ella por casualidad nos vio a nosotros. Su casa era de color azul, y desde entonces fue para mi "la chica de la ventana azul". Apesar que pasé varias veces por su casa en estos siguientes años nunca la he vuelto a ver (aunque su casa sigue siendo de azul, aunque ahora de un azul claro).
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